Nuestra Fundación lleva más de 55 años transformando la sociedad, dedicada a la integración social de las personas más desfavorecidas, generando y potenciando otra oportunidad para un proceso de cambio basado en la confianza, el respeto y la ilusión.
Una de nuestras áreas de actividad con más recorrido a lo largo de nuestra historia, es la de Mujer e Infancia que ha englobado varios proyectos que han ido evolucionando a lo largo del tiempo para ir adaptándose a las nuevas necesidades y realidades de sus beneficiarias.
Así hasta el año 2020 ha estado activo el proyecto Borja, enmarcado dentro del área de Mujer e Infancia. Este proyecto nació con el objetivo de posibilitar la reinserción social de las mujeres que están cumpliendo la última parte de su condena a través de la normalización laboral, psicológica y personal. Era una unidad dependiente del CIS (Centro de Inserción Social) Victoria Kent, las mujeres que estaban residiendo en este piso tutelado estaban cumpliendo el tercer grado de su condena sin poder contar con la presencia de sus hijos e hijas.
Para lograr el objetivo planteado se plantearon los siguientes objetivos específicos que les facilitaron:
1. Adquirir las destrezas cotidianas básicas para integrarse en una vida normalizada de una forma eficaz.
2. Alcanzar la estabilidad personal necesaria para retomar su propia vida y comenzar a plantearse objetivos personales.
3. Adoptar habilidades sociales y personales básicas, que facilitaron su integración en la sociedad normalizada y les permitieron recuperar y estrechar lazos afectivos con personas del exterior.
En el año 2020, el proyecto Borja alcanzó a 19 personas beneficiarias. Con beneficiarias directas: 4 mujeres, reclusas y exreclusas en vulnerabilidad social, con edades entre los 31 y 50 años. Con educación primaria y en situación de precariedad laboral. Y 15 beneficiarios indirectos, ya que estas mujeres tenían hijos a su cargo y su inserción ha repercutido positivamente en el desarrollo de su entorno más cercano.
A finales del año 2020 y según las mujeres iban cumpliendo su objetivo general de reinserción, el proyecto se ha ido redefiniendo para llegar en un futuro a prestar un apoyo y seguimiento a estas mujeres en su fase nueva de autonomía.
Este proyecto ha contado con la financiación de la Comunidad de Madrid, con cargo al IRPF 2019.
Hasta ahora hemos atendido a 2.185 personas, 27 madres y 38 menores en prisión realizando actividades de ocio y tiempo libre; 152 madres y 118 menores en exclusión conviviendo en nuestros hogares, 12 mujeres insertadas laboralmente son algunas de las cifras que avalan nuestra gestión.
A día de hoy, la Fundación se mantiene como una de las ONG nacionales más populares y con mayor capacidad de respuesta a los problemas sociales de los colectivos severamente excluidos, así como un colaborador necesario de la Administración Pública para atender a los mismos.
“Creemos en un mundo más justo y trabajamos para generar nuevas oportunidades”